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domingo, 25 de diciembre de 2011

Echar de menos


Echo de menos un abrazo tuyo. Quizás dos. O tres.
Echo de menos que fingas no estar pendiente.
Echo de menos tu sonrisa, tus ojos y tus pies.
Echo de menos que huyas para verme.

Echo de menos tus preguntas sin preguntas.
Echo de menos el olor que dejas cuando te marchas.
Echo de menos tus llamadas sorpresa.
Echo de menos largas conversaciones sin importancia.

Echo de menos tus miradas cómplices.
Echo de menos oir que me defiendes.
Echo de menos que te quites los pendientes.
Echo de menos tu fidelidad mientras le mientes.

Echo de menos titubear de los nervios.
Echo de menos el calor de tus manos.
Echo de menos tu voz en mi teclado.
Echo de menos volver a serte claro.

Pero como querer me quiero,
no quiero que me vuelvas a querer.
Quiero que, al menos, duela menos
si me levanto echándote de menos.

LA SUERTE NO ERA UNA DAMA y RESACAS

LA SUERTE NO ERA UNA DAMA

Cuando era la mitad de viejo, me sentaba
en los bares, me hundía ahí
hasta las orejas
pensando que algo me iba a pasar,
quiero decir, con las mujeres:

"Hey, nena, escúchame, la costa dorada
llora por tu belleza..."
o algo así.

Sus cabezas nunca daban vuelta, miraban
adelante, derecho hacia adelante,
aburridas.

"Hey nena, escúchame, soy un genio
ja, ja, ja"

Silenciosas ante el espejo de un bar, esas
mágicas criaturas, esas sirenas secretas,
de piernas largas, vestidos ajustados,
tacos altos, aros, bocas de
frutilla, se sentaban ahí, se sentaban ahí,
se sentaban ahí.

Una de ellas me dijo: "me aburrís"
"No nena, lo que pasa es que
no lo entendiste"
"bah, callate"

Entonces llegaba algún Dandy, algún tipo
pulcro, de traje, bigote, corbata.
Era flaco, luminoso, delicado,
tan canchero
y las damas lo llamaban
por su nombre: "¡Oh Murray, Murray!"
o algo así.

"¡Hola chicas!"

Yo sabía que le pasaba el trapo
a cualquiera de esos boludos,
pero no importaba mucho en el orden
de las cosas,
las damas se juntaban alrededor de Murray
(o algo así) y yo seguía pidiendo tragos,
compartiendo la música con ellas
y escuchando la risa desde afuera.

Me preguntaba que cosas maravillosas
me estaba perdiendo, el secreto de la
magia, algo que sólo ellas conocían,
y me sentía de nuevo el idiota en el
patio de la escuela -
a veces un hombre nunca
sale de ahí,
todos pueden ver la marca.

Así que
yo estaba aparte,
"soy la cara perdida de
Jano", decía en medio de algún
silencio momentáneo
por supuesto, para ser
ignorado.

Ellas se subían a
los autos
fumando
riendo
y finalmente se iban hacia
alguna victoria
consumada,
abandonándome a mis tragos
sólo yo
sentado ahí
la cara del mozo cerca de
la mía:
"¡YA CERRAMOS!
Su gorda e indiferente cara
barata bajo la luz
barata.

Yo tomaba mi último trago
salía hacia mi viejo auto
aguantándome
subía
manejaba siempre con mucho cuidado
hasta mi habitación
alquilada.

Recordaba el patio de la escuela
otra vez,
el recreo,
me elegían último para
el partido de fútbol,
el mismo sol brillando sobre mí
y sobre ellos,
pero ahora era de noche y
casi toda la gente del mundo
estaba con alguien,
un cigarrillo colgaba de mis labios
y escuchaba el ruido
del motor

RESACAS

probablemente he tenido más
que ninguna otra persona viva
y aún no han acabado
conmigo,
pero algunas mañanas me he
sentido
morir.

como sabéis, la peor borrachera es la que se sufre
con el estómago vacío, abundante
tabaco y una generosa mezcla de
licores.

y las peores resacas, las que sufres al
despertarte en el coche o en una habitación extraña
o en un callejón o en la cárcel.

las peores resacas son las que tienes al
despertarte y darte cuenta de que has hecho
algo absolutamente vil, estúpido y
posiblemente peligroso la noche anterior,
pero
no consigues acordarte de
qué.

y te despiertas con múltiples
trastornos: con heridas en diversas partes
del cuerpo, sin dinero
y/o posiblemente y a menudo sin
coche, si es que tenías coche.

puede que llames por teléfono a una
mujer, si es que has estado con alguna, para que
la mayor parte de las veces te cuelgue
de un golpe el teléfono.
o que, si la tienes al lado en aquel momento,
sientas su indignación y su
cólera.

a los borrachos no se les perdona nunca.

porque los borrachos se perdonan a sí mismos
porque necesitan seguir
bebiendo.

hay que tener mucho aguante
para pasarse años
bebiendo.

a tus compañeros de cogorza los ha matado
la bebida.
tú mismo entras y sales de los
hospitales.
donde a menudo te advierten de que
“una copa más te va a
matar”.
pero
tú los desmientes
tomándote más de una copa
más.

y cuando te acercas a los tres cuartos de
siglo de edad
te das cuenta de que necesitas cada vez más
priva para
emborracharte.

y las resacas son peores,
y te cuesta más
recuperarte.

y lo más extraordinariamente estúpido de
todo es
que no te disguste
haberlo
hecho
ni seguir
haciéndolo.

escribo esto a máquina
bajo el yugo de una de mis
peores resacas.
abajo
hay tiradas múltiples y variadas
botellas de
alcohol.

ha sido todo tan bestialmente
delicioso,
este río turbulento,
esta oprimente
aniquiladora
locura
que no se lo deseo a
nadie
salvo a mí,
amén.

Charles Bukowski

lunes, 1 de agosto de 2011

Si los hoteles hablasen...

Al entrar en la habitación de un hotel de lo primero que eres consciente es de que no estás en tu habitación. Si, puede parecer obvio, pero el hecho de que jamás el espacio será tuyo se termina confundiendo en ser un refugio para las grandes intimidades.

La disposición de los mismos depende tanto de la cadena, como de la calidad y disposición de la habitación. Pueden ser con vistas a la calle, a patios interiores, a la playa o a la montaña. Con minibar escueto y gratuito a lujoso y llenos de sorpresas. Con cafeteras gratuitas y botellas de agua (patrocinadas por alguna escuela de negocios) a comprar en algún supermercado todo lo necesario. Con el cuarto de baño con placa de ducha a bañera con hidromasaje. Con armarios pequeños donde cabe bastante poco a grandes que incluyen copas para brindar.

Pero el hotel no es sólo un lugar de descanso. El hotel es, por excelencia, el negocio de los negocios. Si. Puede haber negocios que se esconden en hoteles...y hoteles que esconden negocios. La historia del capitalismo reciente más completa está escrita en las paredes de los hoteles de todo el planeta. Me explico.

Hay desde hoteles para las élites de primera, segunda y sucesivas hasta hoteles para las clases más bajas. Pero ya no se trata del precio. Si analizas las relaciones laborales que hay en los hoteles, resulta un esquema bastante básico de lo que es el capitalismo: las que más trabajan son las clases más bajas, las altas suelen ir a disfrutar. Y claro, hay hoteles donde las clases bajas disfrutan...pero las que trabajan siguen siendo clases bajas. El servicio es el servicio.

De las clases más bajas que trabajan en hoteles, en el colectivo de las mujeres destacan las limpiadoras y prostitutas: encaja en el esquema básico de la explotación de la mujer. Pero en algo ha "mejorado" el capitalismo hasta la fecha: como ya tienen formación, se les contrata en puestos de recepción (y a veces incluso dirección) pasando a ser un rango menos exclusivo del hombre.

En el caso del hombre, hay una profesión servil a la par que denigrada que es exclusiva del mundo hotelero: ser "el botones". La imagen que se nos viene es el del traje que le da al botón del ascensor y con la misma mano, con guante blanco, te pide la propina. El que te lleva la maleta para que tú no hagas nada. El que está pendiente de ti. Tu siervo. Pero un "botones" igualmente podría ser un "recepcionista". De hecho el concepto de "botones" nos resulta bastante anticuado, ¿verdad? Pasa como con el concepto de "esclavo": las relaciones de poder están disfrazadas en eufemismos. Cosas del lenguaje.

Pero ya no es sólo por la relación laboral o por lo lujoso que pueda ser un hotel, también muchos de sus usos están directamente relacionados con el mundo empresarial o financiero. También con el aspecto sindical, o con acuerdos políticos. Con traiciones y conspiraciones. Con "cuernos" o declaraciones de amor. El lugar es lo de menos: desde una sala de conferencias, la propia barra del bar, los pasillos, las habitaciones, el gimnasio o alguna sala de descanso.

Y es que algún día, los historiadores se darán cuenta que la historia de la sociedad moderna no está en los museos. Está en los hoteles, en los hoteles todo el mundo.

miércoles, 27 de julio de 2011

Noches de Alameda

El insomnio aprieta cuando hace calor, y más cuando te recuerdo tumbada mirando hacia el balcón. Busco en mis bolsillos, está todo lo necesario. Busco en mi corazón, está todo lo prescindible.

Esta va por aquellas noches solitarias, pensativas, en algún banco del Alameda de Hercules. Por el "Joselito" que "no es güeno ni ná" mientras te pide algún buche del litro o algo "pa un café". Por aquel señor enchaquetado que a las 7 de la mañana le pedía la mano a una yonki que te hablaba como si fueras del barrio de toda la vida.

Va por los güiris que buscan "hash" sabiendo que le van a estafar. Las travestis que te lanzan piropos para que caigas en Joaquin Costa, aquella calle donde las mujeres viven a "costa" de Joaquín.

Por la segunda planta de Don Pedro Niño 17: os echo de menos. Por las peleas posesivas de la kinki del bajo del bloque con el novio y las visitas al bloque de al lado a horas intempestivas.

Por los intentos de robos de bici en las callejuelas del centro. Por tus llamadas a las cuatro de la mañana pidiendo que te acompañe al Jackson a por una cerveza, esperando (sin suerte) poder meterte en mi cama unas horas después. Por las noches de poesía que tanto anhelaste y que nunca compartí contigo.

Por las noches de helados del Freskura, dos amigos y una botella de agua, recordando a esa Alameda de 15 años y albero. Por las sesiones de café y cigarros en el Bulebar para luego ver alguna buena película en el salón. Por la noche que me encaré con cuatro y salí airoso. Por las veces que he salido con buena reputación de algún cacheo de la Policía.

Por los Viernes de militancia, tapitas y banquitos. Por el vino "proletario" de Extremadura que nos bebíamos en mi habitación. Por los cuentos que te leía cada noche. Por tus gemidos, los de ella y los de la otra.

Por cualquier noche en Jackson, Kafka o Malandar. Por los almuerzos y cena en la azotea. Por las mañanas de olor a tabaco y alcohol por el suelo. Por la última noche del piso, tres en calzoncillos en lo alto del edificio discutiendo sobre la disposición geográfica de Sevilla.

Por todos los borrachos, locos, artistas, ladrones, yonkis y putas del Alameda. Por los grandes momentos que he vivido en los últimos años. Por ti, por mi...y por todos mis compañeros y compañeras. Debajo de los adoquines, está el albero. Venceremos ;)

jueves, 30 de junio de 2011

Rescate

"Enfermo, y sin posible medicina /
que cure uno por uno mis excesos, escandalosamente ardientes"

Pido cama, de José Cordoba "El Chivi"


Lo confieso: puedo pasarme días escribiendo compulsivamente. De hecho, esta enfermedad la sufro desde hace meses: tú (quizás vosotras) tienes parte de culpa.

Mi primer problema, y el más importante, es que tengo el corazón en suspenso. Si, se mantiene en "stand by" hasta que me da por despertarlo al ritmo de cafeína, taurina, y en ocasiones algún vicio barato como el alcohol. Me lo gasto casi todo en hacer que mi corazón funcione. La gasolina del consumo, dicen.

Tenía miedo de que si lo despertaba para ti lo tiraras de nuevo al suelo. Yo, que quise ser libre y amar al mundo, descubro que mi amo es la falta de tu amor. Lo irracional le vuelve a uno imbécil, ¿verdad?

"No te canto a ti, ni a ti, ni a ti, ni a ti, ni a ti /"

Lo que pretendo es hacer público ese gran descubrimiento para ver si así me atormento menos. Lo que pretendo es pedir que se me rescate a quien me secuestró...como Grecia. Sólo que yo lo hago con la boca pequeña, quizás en silencio.

"canto al ideal romántico que vive en mi /"

La cama es una parte importante de mi amor, pero una parte al fin y al cabo. Tomar una parte por el todo, aparte de un vicio frecuente, es metonimia...y yo soy más de metáforas.

Pero...¡que lindas metáforas resultaron ser tus ojos! Sin embargo, ahora sólo tengo ganas de sacártelos, ponerlos sobre mi mano, soplar y que se los lleve el viento.

Un beso, una leve caricia y hasta pronto,

Yo

P.D: Este post data (I love play on words) del 30 de Junio de 2011. Antes y después escribí lo que será publicado. Que os aproveche...